La ruta del fin de semana fue (203 km):
TINEO
CALLERAS
Hoces del Esva
NAVELGAS
BARCENA DEL MONASTERIO
POLA DE ALLANDE
CANGAS DEL NARCEA
Tineo
Embalse de la Barca
Belmonte
PRAVIA
CALLERAS
Hoces del Esva
NAVELGAS
BARCENA DEL MONASTERIO
POLA DE ALLANDE
CANGAS DEL NARCEA
Tineo
Embalse de la Barca
Belmonte
PRAVIA
Este fin de semana había que celebrar la llegada de mis 40
años y nuestro 7º aniversario de boda,
así que aunque amenazaba alguna lluvia,
decidimos hacerlo como nos gusta, encima de la moto
recorriendo la tierrina.
Haríamos posada y fonda en Tineo, y aunque al día siguiente
amanecíamos con
bastante niebla
se disipaba en cuestión de minutos y el tiempo iba a
acompañarnos durante la jornada.
Tineo está rodeado de parques eólicos que se pueden ver desde cualquier carretera cercana...
A mí aún me cuesta acostumbrarme a ver ese paisaje "herido", aunque siempre pienso que
es en favor de una menor contaminación y con eso me consuelo.
Decidimos hacer turismo rural del duro, y ante tal decisión
nos tocó compartir carretera
con las dueñas del asfalto como siempre que
tomamos este tipo de decisiones.
A pesar de haberlo vivido ya en muchas ocasiones, nunca deja
de sorprenderme y de
hacerme gracia la cara con la que nos miran… Es
superdivertido!
Tras pasar por Calleras y las hoces del Esva,
llegamos a Navelgas, donde después de quitar el frío de la
mañana con un café caliente,
dimos un paseo por el pueblo
La siguiente parada era Bárcena del Monasterio
y de ahí a Pola de Allande por una carretera recién
asfaltada por la que se
disfruta de un gran paisaje de toda la comarca.
Siempre que llego a Pola de Allande por esa carretera, me
llama la atención el Palacio
que se ve en lo alto a la derecha, así que
decidimos parar en esa zona y caminar hasta arriba;
tras un breve paseo entre
nogales, manzanos y setas,
pasando por la capilla de Ntra. Sra. Del Avellano
llegamos al Palacio de Cienfuegos-Peñalba
Y estando donde estábamos nos metimos la correspondiente
fartura en el
Restaurante La
Nueva Allandesa,
repollo relleno y cachopo incluído, así que
luego hubo que ir a reposar la comida,
y lo hicimos en el área recreativa que
hay allí mismo al lado del río.
Y tras disfrutar de aquel ratín, donde no se oía más que el
ruido del agua y el cantar de los pájaros,
tiramos dirección Cangas del Narcea,
donde se celebraba la Fiesta
de la Vendimia
y el bullicio de la gente y la fiesta recorría las calles y llenaba las plazas,
entre gaitas, cofrades y mozos escenificando la pisada de la uva.
Al día siguiente salimos dirección Cornellana pero por el
sur, por el Embalse de la Barca,
y como era pronto tiramos hasta Belmonte para tomar un vermutillo.
Por el
camino Darío se unió a nosotros y acabamos disfrutando de una deliciosa comida
en el
Restaurante Mil Sabores en Pravia.
Lo mejor de la jornada, "el descanso del guerrero" ¡¡¡parece una momia motera!!!
Una SONRISA??? |
Tampoco lo hicisteis mal el finde ehhh!!!
ResponderEliminarMás descansado que el nuestro fue....a ver si coincidimos!!
Besu