PANDEMIA: SÁBADO 18

Mucha gente ha pasado por mi vida, unos se quedan por tradición, otros se van por traición, algunos se quedan por derecho propio y otros desaparecen sin razón; cuando alguien se cruza en tu vida, la magia de la amistad se produce cuando mutuamente somos capaces de descubrir la maravilla del otro, y nuestro mérito está en disfrutar de esa magia siempre a tope. Y dentro de poco se cumplirán 5 años desde que 2 personas se cruzaron en nuestra vida y se produjo la magia, allá en Casa Matilde, y desde entonces han pasado a ser una parte muy importante de nuestras vidas.

Creo que he normalizado demasiado esta situación, ha bajado el nivel de adrenalina en mi cuerpo, hoy ya no me arreglo aunque sea sábado (como antes cuando no salía) hoy no voy a grabar el vídeo vermuth para mis amigos, con 4 fines de semana y 4 vídeos he cumplido mi propósito en esa primera fase, sacar una sonrisa y animar a muchos de ellos, saber parar a tiempo también es una virtud, estoy vaga vaguísima y aburrida... sin saber qué hacer todo el fin de semana, porque lo que se me ocurre, limpieza, gimnasia, videollamdas... no me apetece.

Nada, debe ser que no estoy buena de la cabeza, porque al final hubo vídeo, cantando por Julio Iglesias... No hay mejor terapia que la risa a carcajadas hasta que te duele la barriga ni mejor arma que una sonrisa; con haber sacado alguna en estos días que están tan caras ya habrá merecido la pena. Y por la tarde sesión de gimnasia.

Videollamada con amigas de Francia y Gijón... en Francia me ha dado la sensación de que no están tan "confinados" como nosotros, ni con tantas restricciones; de hecho a las 8 mi amiga que vive en una casa salió a la calle y todos los de las casas con la música puesta para arriba y para abajo hablando entre ellos y sin distancia de seguridad ni nada; dudo de todo,  no se que es mejor ni que es peor; creo que aquí estamos como estamos, con el ejército y la policía en la calle, porque no hemos sido autoresponsables, y a la vista está que seguimos sin serlo... un mes después mucha gente, aún demasiada, sigue haciendo lo que le da la gana.

Cervecina y segunda videollamada con amigos, que es sábado y me he venido arriba!

Imagino que poco a poco empezaremos a salir, no se muy bien cómo será la vuelta a la vida normal, pero tampoco le doy muchas vueltas, porque sólo se puede pensar a corto plazo, tanto personalmente como laboralmente; pensar a medio o largo plazo es absurdo.

Esta mañana limpiando me fijé en un montón de objetos que habitan en casa, en silencio, a veces imperceptibles; pero hoy se dejaron ver, hoy me hablaron. 

Leí hace poco que no llamásemos al psicólogo si hablábamos con los objetos durante el confinamiento, que era normal, que llamásemos sólo cuando creyésemos que las cosas nos hablasen a nosotros ¿habrá alguno de guardia mañana?

Al final hice todo lo que no me apetecía cuando me desperté. Me consuela porque eso significa que no he normalizado esta situación anormal. Creo que ya no necesito psicólogo.

Os lo dije, sólo se puede pensar en el corto plazo; mañana la estrategia es otra.